Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Juan 13.14
Ese es un ejemplo que nuestro Señor Jesús nos dejó, ser humilde para enseñar y para hacer un ejemplo.
Trayendo a los días de hoy, muchas de las veces dejamos de aprender, pues pensamos que ya sabemos todo y que no precisamos dar oídos a aquellos que están cerca de nosotros.
O dejamos de enseñar para aquellas que están llegando y queriendo aprender. Y por un recelo usted ha guardado para usted sus experiencias, que podrían ayudarla a crecer, espiritualmente hablando.
Vamos a ser humildes para aprender y enseñar. Vamos a ayudar a los trabajadores de la Mies de nuestro Dios. Eso coopera para bien de la Obra de Dios.
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